El ensayo de Norbert Elias 'Sobre el Tiempo'
ocupa un lugar destacado entre sus estudios sociológicos, por cuanto formula y
desarrolla aquí algunas de sus principales opiniones sobre un tema central de
nuestra tradición cultural. De modo particular pretende demostrar que lo que
llamamos tiempo no es ni un dato 'a priori' de la naturaleza humana (Kant), ni
una propiedad inmanente de la naturaleza no-humana, sino más bien el resultado
de una síntesis humana que sólo puede entender quien la refiera a ciertos
procesos sociales.
La experiencia del tiempo, tal como se vive hoy en día, se diferencia de
estadios más primitivos del desarrollo de las sociedades por la continuidad.
Mientras que las sociedades primeras delimitaban el tiempo de acuerdo con sus
necesidades, siguiendo ciertos momentos y ocasiones, las actuales disponen de
una retícula rigurosamente subdividida en unidades temporales, trabadas entre sí:
las horas, los días, los meses, los años, etc. Dicha retícula domina toda su
vida. La presencia omnímoda y la fuerza del sentimiento del tiempo que de ello
resulta contribuyen poderosamente a que experimentemos el ‘tiempo’, aun sin
quererlo, como algo independiente que existe por su cuenta.
Este ensayo de Elias ejemplifica las dificultades con que se enfrenta el
desarrollo de los medios y símbolos de la orientación humana en su afán por
llegar a un plano superior de síntesis, que Elias ha ido elaborando a través
de diversos conceptos del 'tiempo'.
source: Fondo de cultura económica